El Archivo Diocesano de Cuenca está presente en el XXXIV Congreso de la Asociación de Archiveros de la Iglesia en España, que reúne hasta este sábado, 13 de septiembre, en Palencia a un centenar de profesionales de toda España.
La archivera Miriam Olivares Santamaría representa al Obispado conquense en este foro especializado, que este año debate bajo el lema «Universidad y Archivos de la Iglesia».
El encuentro, que se celebra en el palacio episcopal de Palencia, se ha consolidado como el principal punto de encuentro profesional para los responsables de los fondos documentales eclesiásticos. La cita sirve como plataforma para el intercambio de experiencias en la gestión, conservación y digitalización del patrimonio documental de la Iglesia.
Diálogo entre tradición y modernidad
La elección del lema de este año no es casual. El congreso profundiza en las relaciones históricas y actuales entre los archivos eclesiásticos y el mundo universitario, un vínculo que ha sido fundamental en el desarrollo del conocimiento occidental desde la Edad Media.
Miriam Olivares participa activamente en las sesiones de trabajo, donde se abordan las últimas novedades en gestión documental y las estrategias para hacer accesibles estos fondos históricos a investigadores y al público en general. La presencia del Obispado de Cuenca en este Congreso refleja su compromiso con la preservación y protección del patrimonio.
El Archivo Diocesano de Cuenca: memoria viva de la provincia
Entre sus documentos más relevantes se encuentran los registros sacramentales de toda la diócesis, incluidos los libros de bautismo de parroquias de toda la provincia, así como un extenso fondo bibliográfico que refleja la actividad cultural y social promovida por la Iglesia en Cuenca a lo largo de los siglos.
El congreso, organizado por la Asociación de Archiveros de la Iglesia en España -entidad canónica erigida por la Conferencia Episcopal Española, sirve también para establecer líneas de colaboración entre las distintas diócesis e instituciones académicas, reforzando el papel de los archivos eclesiásticos como garantes de la memoria histórica y recursos al servicio de la sociedad del siglo XXI.