Comunicado del Obispado de Cuenca:
Una vez finalizada la Semana Santa para la que la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos emanó disposiciones muy concretas, parece oportuno recordar las medidas relativas a la actividad pastoral de las parroquias de la diócesis, establecidas con Decreto de 15 de marzo de 2020, las cuales, a partir de hoy, recobran toda su vigencia.
Las medidas contenidas en dicho Decreto observan cumplidamente lo dispuesto por el Gobierno de la nación con el Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, art. 11. Los Reales Decretos posteriores (465/2020 de 17 de marzo; 476/2020 de 27 de marzo y Orden SND/298/2020 de 29 de marzo) relativos al mismo asunto no han modificado el contenido de dicho artículo en lo relativo a 1) asistencia a los lugares de culto, 2) y ceremonias religiosas.
Con el fin de facilitar su cumplimiento, se reproduce aquí el texto del citado Decreto de 15 de marzo de 2020 en el que se detallan las medidas a observar en la diócesis de Cuenca mientras dure el estado de alarma:
“Ante el creciente número tanto de los afectados por la pandemia del Covid-19 como de los fallecidos a causa de la misma, y habida cuenta de las medidas tomadas en el día de ayer por el Gobierno de la nación encaminadas a la prevención y erradicación de la enfermedad, he considerado oportuno tomar las siguientes resoluciones que vienen a añadirse a las adoptadas en los días pasados.:
- Queda suprimida la celebración pública de la Santa Misa con asistencia de fieles en todos los templos de la diócesis a partir de este día y en tanto se mantenga el estado de alarma decretado por el Gobierno.
- Se suspenden también las celebraciones sacramentales como bautismos, matrimonios, primeras comuniones, confirmaciones o celebraciones comunitarias de la Penitencia.
- Se suprimen igualmente en toda la diócesis y por el mismo periodo de tiempo todas las celebraciones públicas de piedad, tales como Vía Crucis, retiros, conferencias o charlas cuaresmales.
- Las exequias se celebrarán de una manera simplificada en los cementerios o tanatorios, reservando para un tiempo posterior la celebración de la Misa exequial.
- En los conventos de clausura se podrá celebrar la Santa Misa con la comunidad religiosa, cuidando de observar estrictamente lo dispuesto en las medidas dictadas por el Gobierno en relación con la actual crisis sanitaria (Real Decreto de 14 de marzo de 2020, art. 11).
- Los sacerdotes deberán estar disponibles para atender pastoralmente a los fieles, de manera especial a los enfermos.
- Los lugares de culto quedarán abiertos en el horario que los responsables de los mismos consideren oportuno.
Se recomienda a los sacerdotes la celebración diaria de la Santa Misa a puerta cerrada, en privado o con algunas personas de su libre elección, tal como se ha sugerido desde la Conferencia Episcopal, recomendando que la ofrezcan por las personas fallecidas y enfermas y pidiendo a Dios Nuestro Señor por la pronta superación de la crisis sanitaria.
Se recomienda igualmente a los fieles que, especialmente los domingos, sigan la Santa Misa por los medios de comunicación (radio o televisión), posiblemente en familia, y que dediquen un tiempo a la oración con la lectura del Evangelio o el rezo del Santo Rosario, pidiendo que pase pronto la emergencia sanitaria. Este momento puede ser buena ocasión para el examen y reflexión sobre nuestro modo de vida, los valores que realmente la guían y las metas que perseguimos”.
Si se diera algún problema en el cumplimiento de estas medidas, ruego a los sacerdotes lo comuniquen cuanto antes a este Obispado.
Cuenca, a 17 de abril de 2020
+José María Yanguas
Obispo de Cuenca
